Logística y Transporte

La irrupción de los coches chinos en Europa

27 de octubre de 2023

  • La industria automovilística china vive sus mejores momentos. Está ante un crecimiento insólito en el mercado europeo, que hace reaccionar a la UE ante el masivo desembarco de marcas asiáticas dentro de los países de la unión.
  • El mercado español es el que registra el mayor incremento de cuota de los vehículos chinos. Entre enero y septiembre de 2023, en España se han comercializado 27.174 turismos de marcas chinas, lo que supone cuadruplicar las unidades matriculadas en el mismo periodo de 2022.

En este artículo, te explicamos el porqué del auge de los coches chinos en España y Europa, examinando las razones detrás de su creciente popularidad y su impacto en la industria europea.

¿Cómo ha evolucionado la industria automovilística en China?

El posicionamiento de la automoción china, a pesar de que a muchos les haya cogido por sorpresa, no se ha fraguado de un día para otro. Es resultado de una red de conocimientos e infraestructuras que han adquirido en gran parte a través del know-how europeo.

Pese a un crecimiento tardío a principios de los años 90, China lleva muchos años vinculada a empresas europeas, aprendiendo sobre sus procedimientos y digitalización. Hoy en día son ya el mayor productor de vehículos del mundo, situándose como líder indiscutible en el vector de vehículos eléctricos.

¿Cómo han conseguido posicionarse?

En un escenario en el que las marcas buscaban mano de obra barata, el Gobierno chino proporcionaba terreno y trabajadores a cambio de que dichas compañías colaboraran con las empresas locales. Esto les ha permitido adquirir conocimientos sobre la tecnología occidental y aplicarla en la fabricación de sus propios vehículos.

Hace unas décadas se veía a los coches chinos como vehículos de poca calidad, pero realmente lo que ocurría es que su enorme demanda interna absorbía los modelos más sofisticados, y los vehículos más económicos y de peor calidad eran los que exportaban a países fundamentalmente de Latinoamérica, con costes extremadamente bajos.

Ahora las tornas han cambiado, los coches que comercializa China en todo el mundo son muy similares a los de las marcas europeas, con diferencias de calidad inapreciables.

  • A esto se une una política arancelaria muy favorable para China, en la que a ellos les cuesta mucho menos vender coches en Europa que a las marcas europeas venderlos en China.
  • Además, el gobierno chino está subsidiando de forma millonaria a las empresas automovilísticas del país. Esto hace que de repente a Europa, que era potencia automovilística de referencia, le esté costando mucho competir incluso dentro de sus propias fronteras.
  • Por si fuera poco, China ha sabido ver muy bien la oportunidad de la electrificación. En un país que no dispone de grandes reservas de petróleo o combustibles fósiles, desde el gobierno chino ha habido una apuesta decidida por la electrificación, a tal punto que se lleva años incentivando su compra en el mercado interno. Esto les ha permitido avanzar mucho más rápido que Europa en el desarrollo de esta tecnología, tanto en lo que se refiere a la producción de coches eléctricos como a sus componentes, como baterías, para las cuales también disponen de grandes reservas de tierras raras.

En resumen, la historia reciente de la industria del motor en China está marcada por un rápido crecimiento, la apertura a la inversión extranjera, expansión del mercado interno y una apuesta decidida en la producción de vehículos eléctricos, lo que la ha convertido en una fuerza importante en el panorama automotriz global.

En qué áreas compite China frente a Europa

Pese a que no existen tantas diferencias con los coches europeos, ¿qué los hace tan diferentes al mismo tiempo? ¿Por qué han ganado una cuota de mercado tan rápido? Aquí te damos 3 razones clave del éxito de los coches chinos a las que Europa y América deben hacer frente

  1. Líderes en innovación y acceso a materias primas:

El mercado asiático está marcando la diferencia en esta última década en materia de innovación y desarrollo, en gran parte por su vinculación directa a las tierras raras, 17 elementos indispensables para la fabricación de chips, baterías o cualquier componente electrónico y sus nuevos desarrollos e inversión. Estos desarrollos están siendo apoyados económicamente por el gobierno chino, en mercados estratégicos como el offshore, la automoción o el hidrógeno.

  • Apuesta por los vehículos eléctricos:

A nivel global, la adopción de vehículos eléctricos ha sido encabezada por China, en gran medida gracias a políticas gubernamentales que fomentan su desarrollo y utilización en su propio mercado interno. Numerosas empresas chinas han focalizado sus esfuerzos en la fabricación de vehículos eléctricos, realizando inversiones de calado en esta tecnología, lo que les posiciona en un lugar de liderazgo en el mercado de automóviles eléctricos.

  • Colaboraciones con otras marcas y países:

Establecer relaciones con fabricantes europeos ha facilitado la transferencia de conocimientos y tecnología de vanguardia, lo que ha permitido a China convertirse en el proveedor mundial de la industria. Esta cooperación, en un principio muy beneficiosa para las empresas europeas por acceder a mano de obra barata, le ha salido muy cara a largo plazo, ya que el gigante asiático le está arrebatando el liderazgo en el sector.

 ¿Cómo está afectando a la industria europea y cómo se presenta el futuro del sector?

El crecimiento de los coches chinos en España y Europa ha sacudido la industria automovilística. Las marcas europeas se han visto obligadas a ser más competitivas y a invertir en tecnologías limpias para mantener su relevancia en el mercado. Hasta ahora, la seguridad era un valor diferenciador, pero la amplia dotación tecnológica que se exige de serie ha eliminado en parte este valor diferencial y es por ello que la Unión Europea busca alternativas para poner freno al desembarco de los coches chinos.

La Unión Europea ha reconocido este desafío y está considerando la posibilidad de imponer aranceles adicionales a los vehículos procedentes de China. Sin embargo, se enfrenta a la limitación de no contar con una industria de vehículos eléctricos lo suficientemente competitiva en suelo europeo como para limitar la entrada de estos vehículos del exterior. Por lo tanto, iniciar una disputa comercial podría conllevar un riesgo tanto para los intereses de los consumidores europeos como para los intereses medioambientales marcados en la agenda 2030 y para la neutralidad climática de Europa en 2050.

Sin duda, el auge de los coches chinos en España y Europa es un fenómeno que ha transformado la industria automovilística a nivel global. La combinación de precios competitivos, tecnología avanzada y opciones sostenibles ha logrado un interés mayúsculo en países como España, Italia o Francia. A medida que los fabricantes asiáticos continúen mejorando la calidad y la fiabilidad de sus productos, es más que probable que sigan ganando cuota de mercado en Europa y ejerzan presión sobre las marcas europeas. En este contexto, la UE se verá obligada a intervenir para evitar, una vez más, que China le arrebate a Europa el liderazgo en uno de sus sectores punteros.