- El sector metal y sus tecnologías asociadas viven un momento decisivo. Mientras la industria europea acelera la transición verde y digital, las empresas del Polo Ibérico intensifican su salida al exterior para diversificar mercados y ganar músculo.
- Este artículo repasa las claves de esa internacionalización, los destinos más dinámicos y las palancas que explican por qué Galicia y el resto de la Península se han convertido en una puerta de entrada privilegiada a Europa desde terceros países.
Un mercado europeo en profunda transformación
La Unión Europea sigue siendo el gran paraguas comercial para el sector metal. En 2023 las exportaciones fuera de la UE de maquinaria y material de transporte superaron el billón de euros, el 40 % de todas las ventas comunitarias al exterior, reflejando la fortaleza de la cadena de valor del sector metal.
A la vez, Bruselas ha situado al acero y los metales como industrias estratégicas en su nuevo Steel & Metals Action Plan, recordando que generan 191.000 M € de facturación y 300.000 empleos directos en la UE. Este impulso comunitario llega en un contexto de presión competitiva: costes energéticos, necesidad de descarbonización y tensiones comerciales (EE. UU., China o Rusia) obligan a buscar nuevas alianzas.
El Polo Ibérico: músculo industrial y vocación exportadora
España: tracción desde Galicia
España contaba en 2024 con 812.957 empleos en el sector metal (+2,3 % interanual). Galicia aporta 60.231 trabajadores y representa el 19 % del PIB gallego, con 3.478 empresas concentradas sobre todo en A Coruña y Pontevedra.
La balanza exterior avala esa proyección internacional: las exportaciones gallegas del sector ascendieron a 12.371 M € en 2024 (+4,9 %), siendo Francia, Turquía y Reino Unido los principales destinos, y con la automoción como locomotora (71 % del total).
Portugal: récords históricos y crecimiento sostenido
El vecino luso también pisa el acelerador. Según AIMMAP, las ventas exteriores del Metal Portugal rozaron los 24.000 M € en 2023, nuevo máximo histórico y un 4,9 % más que el año anterior. El 76 % de esos envíos se dirige a socios comunitarios, pero cada vez gana peso la diversificación hacia Norteamérica y África, lo que convierte al eje Vigo-Oporto en un corredor exportador de primer orden.
Mercados de destino: más allá de la UE
Turquía, socio preferente y plataforma euroasiática
Turquía se ha erigido como segundo destino de las exportaciones metálicas gallegas (1.256 M € en 2024) y en el principal receptor europeo de hierro y acero, con compras a la UE valoradas en 6.200 M €. A la inversa, el comercio bilateral total UE-Turquía alcanzó 210.700 M € en 2024, con un crecimiento interanual del 2,6 % en importaciones comunitarias y del 0,8 % en exportaciones.
La aduana turca ofrece ventajas arancelarias gracias a la unión aduanera y, para las empresas ibéricas, funciona como puerta de entrada a Oriente Medio y Asia Central.
Estados Unidos y Latinoamérica: oportunidades pese a la incertidumbre
Las nuevas tarifas al acero y aluminio anunciadas por EE. UU. en marzo de 2025 añaden volatilidad, pero también incentivan la búsqueda de proveedores de alta calidad y bajas emisiones. La industria ibérica, con certificaciones verdes y capacidad para series cortas, puede ganar cuota en estos nichos de valor añadido. Queda ver cómo se resuelve la escalada arancelaria iniciada por la administración Trump, que ha anunciado tasas de hasta un 50% a los productos europeos, lo cual tendría un impacto mayúsculo en la cadena de valor del continente.
Factores de competitividad del Polo Ibérico
Especialización multisectorial
Automoción, naval, energías marinas, renovables o aeroespacial conviven en un hub que comparte tecnología, talento y logística. Esta diversidad hace que los picos de demanda en unas industrias compensen la caída coyuntural en otras, aportando estabilidad a la balanza exterior.
Infraestructura logística atlántica
Puertos como Vigo, Leixões o Sines ofrecen rutas ro-ro y contenedores a ambos lados del Atlántico en menos de diez días, reforzando la competitividad frente a competidores del norte y centro de Europa.
Cadena de valor local
Históricamente en la industria naval gallega, pero también palpable en otras como la automoción, el valor de contar con proveedores locales de primer nivel hace que los fabricantes encuentren atractiva esta región, ya que les permite reducir costes e impulsar la innovación y la competitividad.
Talento y transición verde
La industria invierte en automatización, soldadura robotizada, impresión 3D y formación dual, pero demanda más perfiles cualificados. La captación y reciclaje de talento se perfila como prioridad compartida por empresas y administraciones.
Retos a corto y medio plazo
- Costes energéticos y descarbonización: la electrificación de hornos y el uso de hidrógeno verde marcarán la próxima década.
- Volatilidad geopolítica: sanciones, guerras y tarifas exigen planes de contingencia y cadenas de suministro diversificadas.
- Reglamentos europeos (CBAM, norma de ecodiseño, taxonomía sostenible) que obligan a invertir en trazabilidad y circularidad, pero que también crearán barreras de entrada para competidores con mayores huellas de carbono.
Conclusión
El sector metal europeo atraviesa un ciclo de reinvención y, en ese contexto, el Polo Ibérico se ha consolidado como hub industrial y logístico entre los mercados maduros de la UE y las economías emergentes de su entorno. Aprovechar la ventana de oportunidad pasa por reforzar la cooperación transfronteriza, afianzar la apuesta por la tecnología limpia y seguir abriendo puertas en terceros países que demandan calidad, flexibilidad y cercanía. Mindtech 2025 será, sin duda, el escaparate perfecto para seguir impulsando esta estrategia global desde Vigo hacia el mundo.